Guridi
A Guridi le gustan los lápices, no para comérselos,
que también tuvo una época, sino para hacer líneas.
A veces esas líneas surgen cuando escucha algo,
otras veces se imagina cosas que rápidamente tiene que dibujar donde sea,
y muchas veces, muchas, lee algo: un verso, una frase o un texto largo,
y como por arte de magia las palabras entran por una oreja
y salen a través de su lápiz en forma de imágenes.
Guridi utiliza las sonrisas como ingredientes mágicos, son infalibles.